El origen latino de “traducir” señala literalmente “hacer pasar de un lugar a otro” como si se tratara de un aeropuerto donde se realizan múltiples conexiones. Es un lugar de tránsito, cuya infraestructura se transforma dependiendo del signo de los tiempos para salvar la brecha entre lenguas, sus mundos y su historia.
Aunque la persona que desconoce la lengua inicial dependa absolutamente de la traducción, el producto no pertenece totalmente a ninguna de las dos lenguas involucradas. Es decir,es un intermedio que ninguna de las dos orillas que une puede reclamar como propio, porque la imaginación convierte a la zona de la traducción en una tercera instancia que es creativa y, por tanto, poética.
Si la traducción en sí misma puede hacerse poética, la poesía también puede adquirir un carácter semejante al de la traducción cuando el traslado de los signos y su interpretación se realizan dentro de una misma lengua. Una lengua nunca es clara para sí misma y su autoconocimiento a veces requiere de lo que podemos llamar traducción interior. Se trata de poner a prueba el uso de la palabra en una práctica que es poética y obra de la traducción al mismo tiempo. Un ejemplo destacable es Tender Buttons (1914) [1] de la escritora americana Gertrude Stein (1874–1946), donde se realizan retratos de objetos, comida y espacios con la misión de mezclar lo que se ve ylo que se escucha. De modo que el uso inusual de la lengua desemboca en formas inéditas.
A FEATHERA feather is trimmed, it is trimmed by the light and the bug and the post, it is trimmed by the little leaning and by all sorts of mounted reserves and loud volumes. It is surely cohesive. (p. 14)UNA PLUMAUna pluma es recortada, es recortada por la luz y el insecto y el poste, es recortada casi recostándose y por todo tipo de reservas montadas y altos volúmenes. Es seguramente cohesiva. (traducción mía)
Stein pone en crisis el sentido para darle protagonismo al sonido y a la divagación imaginativa. Emprende una actitud no mimética que se rebela contra la fijación del sentido y su significado unidireccional, que es elocuente respecto a su cercanía con lo más efervescente de la Vanguardia europea de inicios del siglo XX, como el cubismo pictórico de Pablo Picasso y Georges Braque. Por su parte, Stein buscó darle a la lengua un estatus que superara la mera comunicabilidad de la información. En el poema, la pluma evoca al ave en la calle, pero también la desfiguración de esa referencia. No se trata de convocar la pluma, sino la situación de la pluma, de su roce con la luz y con otras entidades que en la semi-oscuridad dibujan una circunstancia no privada de sonoridad. Cuando el poema traduce en su propia lengua se convierte en una barca que se deja llevar por las aguas intermedias entre la metáfora y su referente, y disfruta de la musicalidad de ese entretanto.
A SOUNDElephant beaten with candy and little pops and chews all bolts and reckless reckless rats, this is this. (p. 15)UN SONIDOUn elefante vencido con caramelo y pequeñas explosiones y muerde todo tornillo y temerarias temerarias ratas, esto es esto. (traducción mía)
De esta manera, Stein simula una definición que no aisla un significado y lo esclarece, sino que en las fronteras de la palabra coloca un borde borroso y poroso, por donde la lengua no sólo paladee el mundo, sino se paladee a sí misma. En este sentido, estos poemas funcionan como “traducciones interiores” que colaboran con el autoconocimiento de una lengua. En ellas se intuye simultáneamente la presencia de las cosas y la de la lengua misma, con sus peculiaridades lingüísticas; y, sobre todo, imaginativas.
En la zona de la “traducción interior” no se prohíbe explicar qué es un sonido a través de “un elefante” y de “temerarias ratas”. Esta aclaración que no aclara cuestiona el “esto es esto” y estimula una visión de mundo abierta a nuevas asociaciones. La poesía que traduce hace de la propia lengua una lengua extranjera. Su doble quehacer, poético y de traslación lingüística convierte a este uso de la lengua en una poderosa herramienta de expansión vital.
[1] Stein, Gertrude. Tender Buttons. New York: Mineola, 1997. (traducciones mías).

Ethel Barja (1988, Peru) es autora de los libros Trofeo imaginado entre dientes (2011), Insomnio vocal (2016), Gravitaciones (2013, 2017) y Travesía invertebrada (2019). Su poesía se incluyó en Voces al norte de la cordillera: Antología de voces andinas en los Estados Unidos (2016). Su poesía apareció en Revista Lucerna (Perú), Los Bárbaros, Hostos Review, Inti (EE. UU.), y Hostos Review. Recibió el Premio Cartografía Poética 2019 (Perú). Su producción ha sido traducida al inglés, francés, catalán y portugués. Es licenciada en Lingüística y Literatura por la Pontificia Universidad Católica del Perú y maestra en Literatura Hispánica por la Universidad de Illinois en Chicago. Actualmente, vive en Providence, donde estudia un doctorado en Estudios Hispánicos en la Universidad de Brown y dirige Gociterra, portal de crítica, creación y traducción.